sábado, 23 de junio de 2007

22/06/2007

22/06/2007
Hoy estuve con dos amigas mías de la universidad, amigas que no veía hace tiempo. Al verlas ya mamás con las nenas en brazos sentí una especie de liberación de responsabilidades, muy egoísta de mi parte, pues las vi tan concentradas en ellas y sin tiempo para profundizar conversaciones. Que egoísta soy, pero las nenas están lindas eso no lo puedo negar, pensaba en lo rápido del tiempo y la necesidad también de sentirme mamá con un pedacito de mi y de la persona que amo en mis brazos…. Claro porque creo eso.
Hace tiempo pensé que si no tenía pareja y decidiera ser madre quería decírselo a dos de mis amigos para que uno de ellos fuera el padre de mi hijo, bueno tuve la certeza en ese entonces pero ninguno de ellos me dijo algo diferente. Es decir aceptaron, solo ser padres.

Que egoísta pensar que una mujer desee ser madre como si deseara comprarme las botas de cuero marrón en Bata, mmm no fue acertado de mi parte pues un niño crece junto a una familia para ser completo , sano … el tiempo me hizo ver diferente las cosas , una vez volví a ver a ese amigo , bueno a uno de ellos, me dijo Jane ¿te acuerdas que me dijiste eso? ¿Y sigues con la idea? ya que tenia ya 28 años, mmm no, dije pues no solo al hijo, quisiera también al padre a mi lado. Obviamente ese amigo no me respondió.
Creo en la familia y la unión de dos con propósitos en común.

En fin eso suele ser así, difícil en este mundo tan egoísta , temo traer a aun ser y tenga que atravesar tantas cosas duras que el mundo expone pero también me sobrecoge la idea de educar y querer a un ser humano, llenarlo de tanto amor y mucha presencia para hacerlo integro, amante de la vida … la maternidad esta fuera de contraste con mi vida, por ahora, creo que el hombre a quien ame será el indicado para decidir si acepta o no mezclar su mundo con el mío.

Janneth Mística

3 comentarios:

Edmer Montes dijo...

Imaginar unas manitas y sonriente junto a ti, la mirada cómplice de quien lo hizo posible.
Pero cuan lejos o no, esta realidad esta en relación a lo que estas dispuesta a ofrecer y a perder. No te niegues a arriesgar como tantas veces lo haz echo, perder también es parte del juego. Vuela libre como siempre bichito… azul cuan mariposa repara en tus alas.

Galia Gálvez dijo...

Hay bichito como han pasado los años, sería ideal quedarnos con los pensameintos fijos del presente para el futuro, pero el futuro perfecto nos enseña que segun avanzamos vamos dejando cosas y tomando otras. Increible, mientras leia tu texto, no lo leía, sino que sentí que me lo narrabas así, tu voz se me vino a la mente...Yo me mantengo en mi posición de adoptar un niño.
Besos de luz y sombra

Anónimo dijo...

La salud mejorando, una pequeña rama sembrada en la gris maceta del jardín; todos los días agua y sol sin olvidar hablarle, hablarle de cosas bellas; de los tiempos en la sierra, de los aguaseros que caían en los caminos de tierra endurecida, la infancia que se fue rápido y nos dejo esta cicatriz en el pecho. Un día prenderá y florecerá, es todo cuestión de paciencia, pero esta también el vigente peligro de marchitarse, de la flor que no brota antes del otoño, de la abundancia de agua y minerales, de la falta de raíces o de tierra. Por ahora me queda desafiar y combatir, permanencia en el aire, en el espíritu.

Es inútil hablar del amor o de las parejas que tristemente observo desde mi ventana en las bancas de los parques, hombres que sostienen suaves manos o mujeres de ojos azules, muy bellas, sostenidas. Hablemos de la resistencia, del valor que uno debe poseer para saltar, para romperse los huesos. Algunos años atrás hallé un libro dedicado a una mujer; “sin tregua para…”

La duda esta en el ¿llegaremos?, echos a la mar en una barca de remos cortos y proa redonda. No podemos cuestionar la acción misma de empezar a caminar. El camino es predregoso; un sendero largo de cuestas arriba y extendidas pendientes. Los peligros siempre acechan en los viajes ultramarinos pero recuerda; por las noches, cuando cansado te tiendes de espalda sobre las maderas ves un maravilloso cielo cubierto de estrellas y duermes bajos parpadeantes ojos que te vigilan, ojos que se iran con la luz del nuevo día.

Hablemos, entonces, de la resistencia no del miedo a caminar. Sin tregua caminemos todos las avenidas, los bulevares, las vías, los amores, las personas, las trochas posibles.

Un abrazo como amalgama .
FDH